QUE LINDA ES LA DEMOCRACIA

Elegir, qué? Un Gobierno? Un Parlamento? Administradores de los Asuntos Públicos. Pero, el Poder, el verdadero y auténtico Poder lo tienen Otros. Ya sabemos quiénes.

Los argumentos de nuestro apologistas de la libertad, aquí en Suecia, son contundentes, golpeadores, pero muy curiosos. Si es que uno lee con atención entrelíneas y subtextos.Según ellos, para ser libres hay que permitir que la propiedad privada – es decir el capital y los capitalistas – tenga libertad de acción. Este es un principio fundamental y que no admite discusión.

Los apologistas de la libertad y de la democracia quieren que el pueblo de Cuba se libere de un flagelo espantoso: ese gobierno castrista, comunista etc etc que los oprime y esclaviza. Bravo! Suena muy lindo eso de la libertad y de la democracia.Desde hace un tiempo veo que aspiran y escriben lo mismo en relación a Venezuela. El pueblo de Venezuela debe también liberarse! De qué? Gran interrogante. Los argumentos de nuestro apologistas de la libertad, aquí en Suecia, son contundentes, golpeadores, pero muy curiosos.
Si es que uno lee con atención entrelíneas y subtextos.Según ellos, para ser libres hay que permitir que la propiedad privada – es decir el capital y los capitalistas – tenga libertad de acción. Este es un principio fundamental y que no admite discusión.Si tú no aceptas ésto no eres demócrata. Eres…no sé, otra cosa. Comunista, quizás?Parece ser que ”democracia” es un espacio, una situación, un lugar donde los inversionistas puedan invertir. Actuar. Desarrollarse. Naturalmente, los inversionistas son una categoría especial y privilegiada de personas, tales como Wallenberg, en Suecia, o Ford o Gugegenheim en los Estados Unidos.

Los nombres de los inversionistas siempre se ocultan detrás de grandes sociedad anónimas o bancos donde ellos, naturalmente, tienen la mayoría de las acciones y el poder de decisión. Es lo que en otras palabras puede llamarse el Poder Económico. Anónimo. Aparentemente impersonal y por lo tanto acéptico. Cualquiera puede comprar acciones en estas empresas y ser capitalista. Lindo, verdad? Muy democrático. Otra cosa es quién tiene el Poder.Pero, en este momento, me doy cuenta que estoy describiendo un proceso muy antiguo. Ese proceso que empezó allá en Grecia, en Atenas, 500 años antes de la era cristiana. La democracia. El gobierno del pueblo. El Demos, como se dice en griego. Pero, quién era el Pueblo?, en ese entonces. O quiénes? La sociedad ateniense y la griega se componían de muchos estratos y clases. Esclavos, labriegos, trabajadores manuales o artesanos, comerciantes. Estos estratos son lo que los Romanos llamaron la plebe. Los plebeyos. Plebe, en castellano significa pueblo. Pero este pueblo no es el Demos griego.

El Demos estaba constituído por los iguales. Los iguales eran los terratenientes, los propietarios del subsuelo de la ciudad de Atenas, los rentistas y prestamistas usureros que ya formaban el embrión de lo que mucho más tarde se llamaría capital financiero. Los bancos. Estos señores, estos dueños de la ciudad de Atenas eran el Pueblo. Suena raro a nuestros oídos en la actualidad. Pero los componentes de esa clase eran lo que se llamaba el Demos. Y si agregamos el término Cracia, o sea la palabra Poder, tenemos entonces que Democracia era el Gobierno, la Administración de los Asuntos Públicos de la ciudad de Atenas en poder de una clase privilegiada de propietarios de la tierra y poseedores de capital. Nada que ver con la historia con que adornaron nuestra infancia. La manipulación de la cultura, de la historia, de la información es un invento muy antiguo.

Es un instrumento de Poder.Es válido plantearse ésto, de nuevo, porque hoy día los manipuladores de la información quieren hacernos creer que la Democracia es otra cosa. Y sin embargo, están manejando el mismo concepto que manejaban los viejos atenienses. Con el agravante de que se nos convence desde nuestra más tierna infancia que vivimos en sistemas democráticos porque se nos ha dado derecho a Voto y podemos elegir.Elegir, qué? Un Gobierno? Un Parlamento? Administradores de los Asuntos Públicos. Pero, el Poder, el verdadero y auténtico Poder lo tienen Otros.

Ya sabemos quiénes.Lo importante, cuando estos apologistas escriben y predican sobre la libertad, la democracia, es que su concepto de democracia y de libertades políticas significa que las materias primas y las riquezas naturales de un país sean propiedad de inversiones extranjeras o privadas. La libertad de un pueblo es, así se deduce, la propiedad del capital extranjero o nacional. Mejor si es extranjero.Uno de estos fervientes defensores de la Libertad, así, con mayúsculas es el señor Thomas Gür.

Escribe en un respetable y calificado periódico sueco llamado Svenska Dagbladet. El sábado 26 de Agosto escribió en la Columna Editorial de Svenska Dagbladet – o sea el rostro oficial del periódico para sus lectores – un artículo sobre Venezuela.Su título era Democracias No Liberales. Allí hizo una sopa con Lenin, la Uganda de Idi Amin, el Zimbabwe de Robert Mugabe, la Rusia Blanca de Lukasjenko y la Venezuela del Presidente Hugo Chávez. El común denominador es que estos gobernantes – independientemente de épocas y procesos históricos – han cometido la barbaridad, por no decir el crimen, de nacionalizar los recursos naturales de sus países. El señor Thomas Gür afirma en tono grave y convincente que un país cuyos gobernantes castigan o ponen obstáculos a las personas trabajadoras, sean inversionistas o asalariados, ciudadanos del país o extranjeros, termina en la pobreza.

Esas sociedades se hacen más pobres y más miserables a causa de las políticas de sus gobiernos. Sí, así como suena. Así lo dice. Inversionistas o asalariados. El señor Gür no hace diferencias. Nunca ví, en mi país, que los asalariados pudiesen ser propietarios de una mina de cobre, manganeso, o de una industria de aluminio.

Pero, en fin, pasemos por alto la pretensión del señor Gür de colocar a inversionistas y asalariados en el mismo nivel de posiblidades y de decisiones. Allá él si se lo cree!Pero el señor Gür va todavía más allá y agrega que, en algunos casos, es un régimen dictatorial él que opera con estas políticas enemigas del pueblo. Son sus palabras, no las mías. En muchos casos, prosigue el inefable señor Gür, estas políticas cuentan con el apoyo de una gran parte de la gente, incluso, dice, una mayoría, léase bien, una mayoría de la población; aunque ésto produce graves daños a la vida económica de dicho país. Y aquí llegamos al punto interesante de la reflexión aguda y cabezuda del señor Thomas Gür.

Cito textualmente una trozo de su artículo.La nacionalización de la industria del petróleo realizada por Chávez en Venezuela conducirá al país al mismo tipo de problemas. Caída vertical de la producción, descapitalización y creación innecesaria de puestos de trabajo – los mismos problemas que tuvo Allende cuando nacionalizó las minas de cobre en Chile – pero esta medida cuenta al parecer con el apoyo de grandes grupos de la población. En la elección presidencial en 1988 Chávez consiguió el 56 por ciento de los votos y en el año 2000 obtuvo el 60 por ciento. En el plebsbicito del 2004 el 59 por ciento de los electores votaron No a la propuesta de echar al Presidente de su cargo.El articulista agrega que Chávez construye su popularidad con un aumento de los empleos públicos que son costeados por el alto precio del petróleo. Nótese, entonces: las ganancias del petroleo venezolano no van a parar a bolsillos privados, sino al aumento del nivel de vida de la población venezolana. Esto, repugna al señor Gür y le merece el calificativo de populismo ; y lo peor, es un atentado contra las libertades de los grandes monopolios y multinacionales. Continúa explicándonos que la gran catástrofe para Chile, durante el gobierno del Presidente Salvador Allende, empezó a partir de la Nacionalización del Cobre. Horror! Un atentado contra la propiedad de las multinacionales empresas norteamericanas. Ahí empezó el hambre y la miseria del pueblo chileno.

El señor Gür no alude a la conspiración organizada por el Gobierno de Richard Nixon para sabotear y destruír el proceso reformista chileno. No nombra, por supuesto, al miserable asesino y ladrón llamado Augusto Pinochet, General de Ejército, ni alude al Golpe Militar. Eso crea mala imagen. Pero deja entender que ahí se recobró la libertad. La libertad del pueblo chileno. O la libertad de los capitalistas para adueñarse otra vez de las riquezas básicas del territorio nacional?Si aceptamos, sin mayor discusión, que libertad y propiedad son conceptos sinónimos o mejor dicho dependientes queda, entonces, claro que sin capitalismo no existe pueblo libre. Esta es la tesis fundamental de todos los apologistas burgueses de la democracia.Y por eso la situación de lucha y de combate que el pueblo cubano ha sostenido contra la agresión y el bloqueo de parte del imperialismo yanqui se muestra como una tragedia.

La tragedia de Cuba: pobre país donde los capitalistas, los inversionistas nacionales o extranjeros no tienen libertad para explotar a los que sólo tiene su fuerza de trabajo.En Cuba, la fuerza de trabajo no es una mercancía. Para Svenska Dag Bladet, Dagens Nyheter y otros órganos de prensa, la democracia y la libertad sólo pueden existir bajo el régimen de propiedad privada y de explotación capitalista. Aunque, en esos periódicos no se usa el término explotación. El Presidente Hugo Chávez es un dictador, un tirano en potencia. Aún cuando cuenta con una mayoría abrumadora de votación popular.

Esto no vale, dado que el pueblo venezolano no es propietario ni empresario capitalista.Los comentaristas plantean que el populismo del Presidente Chávez engaña a un pueblo incauto, desinformado y que no valora las ventajas de las inversiones extranjeras. El pueblo de Venezuela está condenado fatalmente a repetir el mismo destino de Chile: a morir de hambre en pocos años si no acude en su socorro una enérgica intervención salvadora de parte de la respetable democracia norteamericana, o de la Unión Europea.

Léase entre líneas el uso del Pentágano y la CIA como instrumento de los Consorcios Internacionales. Afuera Chávez! Y que venga la democracia de los capitalistas a salvar a Venezuela.En 1971, el Gobierno Popular del Presidente Salvador Allende desafiaba al Imperio nacionalizando el Cobre. Hoy es Venezuela la enemiga del Imperio nacionalizando su petróleo. O Evo Morales con su Bolivia indígena llevando adelante un proceso que jamás habíamos soñado.Pero, se nos informa que los Capitalistas son demócratas. Que el Capital es democrático. Cómo puede llamarse a un pueblo entero que quiere liberarse de la explotación capitalista? Antidemócratas?Sométete al Imperio y serás libre.Rompe las cadenas de la explotación capitalista, serás esclavo.Esa parece ser la lógica de los analistas y profundos pensadores de este tiempo. La manipulación ideológica es cada día más abierta, más grosera en nuestros medios de comunicación. Hay gente que no tiene vergüenza. Nunca la han tenido. Es su trabajo. Engañar. Desinformar. Manipular. Megáfonos de la voz de los patrones.Este postmodernismo o fin de la historia, como la llamó un sociólogo y filósofo francés de apellido curiosamente japonés, no es sino el nombre travesti de un capitalismo salvaje que intenta apoderarse del planeta. Aunque a este intento tan ”moderno y progresista” se le llama Globalización.

Viva la Globalización del saqueo del planeta. Abajo Fidel, Chávez y otros tipos antidemócratas que tienen la desfachatez de querer que sus pueblos sean libres sin Capitalismo, sin Explotación y dueños de su propio futuro.

Publicado en continente.nu el : 2006-09-03 obtuvo 1304 Muestras